La salud mental en los estudiantes

En los últimos años se ha podido observar un incremento en los casos de trastornos relacionados con la salud mental entre los estudiantes.1 Este hecho, sumado a que en muchas ocasiones los recursos para abordar estos casos son insuficientes, ha puesto un importante foco en la salud mental estudiantil.

Posibles factores asociados

Todos somos susceptibles de tener un problema de salud mental, incluidos los estudiantes tanto en etapas escolares como universitarias, en las que se afrontan grandes cambios vitales. Hay estudios que han evaluado cuáles son los perfiles con mayor riesgo. Un estudio llevado a cabo por la Organización Mundial de la Salud (OMS) con estudiantes universitarios de diferentes países, entre ellos España, demostró que hay una frecuencia mayor de problemas de salud mental entre los estudiantes de mayor edad, sexo femenino, con padres solteros o fallecidos, que no tienen afiliación religiosa o con estudiantes con identificación no heterosexual, entre otros.1

Otro estudio reciente realizado en estudiantes universitarios encontró numerosos factores asociados a la depresión, ansiedad y estrés. Entre ellos se encontraban, por ejemplo, fumar, padecer insomnio, tener baja autoestima o tener un comportamiento problemático con el uso de internet.2 Además, en el ámbito escolar, los alumnos que sufren maltrato o violencia escolar, así como los inmigrantes, son más susceptibles debido al daño psicológico y a la discriminación.3

Las consecuencias de la pandemia

La pandemia por COVID-19 ha sido responsable de que la población ponga especial atención en numerosos aspectos relacionados con la salud. Actualmente hay numerosos estudios en relación con la excepcional situación de estrés, ansiedad y miedo vivida fruto del COVID-19. Esta situación ha generado o agravado problemas de salud existentes. Como hemos podido experimentar, la pandemia está asociada con un incremento de la exposición de los estudiantes a aislamiento, violencia doméstica, pobreza o uso excesivo de tecnologías, condiciones que aumentan la probabilidad de padecer un trastorno de salud mental. En estos casos se recomienda fomentar medidas como la promoción de hábitos saludables, y el ejercicio de una comunicación positiva.4

¿Cómo mejorar la salud mental de los estudiantes?

En general, la inactividad física y el sedentarismo aumentan la probabilidad de padecer trastornos de salud mental, de manera que una forma de prevenirlos e incluso tratarlos es fomentar el ejercicio físico, puesto que se ha visto que tiene un gran impacto positivo en la salud tanto física como mental de los jóvenes.5

Otras estrategias que han demostrado ser eficaces en la mejora de salud mental en estudiantes son la meditación (mindfulness, yoga y tai chi), las técnicas de relajación muscular y respiración y la terapia cognitivo-conductual.6

Resulta siempre conveniente combinar técnicas para mejorar la salud tanto física como mental, ya que ambas van de la mano. Es muy importante poder conseguir una detección temprana de los síntomas de problemas de salud mental en el alumno, puesto que cuanto antes se tomen medidas, mayor es la efectividad de estas. Además, es conveniente implementar en los planes educativos un sistema de aprendizaje que incorpore inteligencia emocional, desarrollo de habilidades sociales y mejora de la autoestima, para facilitar que los estudiantes se desarrollen también a nivel personal y emocional.3

 Referencias

 

  1. Auerbach RP, Mortier P, Bruffaerts R, et al. WHO World Mental Health Surveys International College Student Project: Prevalence and distribution of mental disorders. J Abnorm Psychol. 2018;127(7):623-38.
  2. Ramón-Arbués E, Gea-Caballero V, Granada-López JM, et al. The Prevalence of Depression, Anxiety and Stress and Their Associated Factors in College Students. Int J Environ Res Public Health. 2020;17(19).
  3.  Del Barco BL. Salud mental en las aulas. La salud mental de las personas jóvenes en España. 2009;66.
  4. Del Castillo RP, Velasco MP. Salud mental infanto-juvenil y pandemia de Covid-19 en España: cuestiones y retos. Revista de psiquiatría infanto-juvenil. 2020;37(2):30-44.
  5. Sanchis-Soler G, García-Jaén M, Sebastia-Amat S, et al. Acciones para una universidad saludable: Impacto sobre la salud mental y física de los jóvenes. 2022.
  6. González-Valero G, Zurita-Ortega F, Ubago-Jiménez JL, et al. Use of meditation and cognitive behavioral therapies for the treatment of stress, depression and anxiety in students. A systematic review and meta-analysis. International journal of environmental research and public health. 2019;16(22):4394.

 

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